Esos nuevos ricos

El siguiente es un artículo de un amigo mío publicado en un blog del movimiento empresarial en el que participo y me ha dado su permiso para ponerlo aquí. Saludos a todos

Hay un grupo de la población que nunca he entendido, ese es el grupo de los denominados nuevos ricos, y no lo he entendido pues la persona de pocos recursos es la persona de pocos recursos y asume su condición, del mismo modo que el rico sabe asumir y actúa en consecuencia con la suya, pero generalmente el nuevo rico simplemente es una persona de pocos recursos que por casualidad se vuelve rica y entonces actúa de una forma extraña.

¿Y qué tiene que ver esto que explico con el entorno empresarial? Mucho, pues quiero referirme a los hábitos de consumo de este grupo de personas, de este segmento de mercado, pues sin duda es un segmento curioso e interesante de analizar.

Y lo analizo empezando por lo que decía en el primer párrafo, la persona de pocos recursos económicos asume su condición y en consecuencia consume acorde a su condición, tiene unas marcas, unas enseñas y unos patrones de consumo bien marcados y habitualmente de esa línea no sale.

Al contrario la persona con recursos económicos le sucede lo mismo que a la anterior pero con otro tipo de gasto, de marcas y patrones de consumo también bien delimitados a su condición. Pero el nuevo rico no es así (y que conste que no me refiero al nuevo rico como a cualquiera que a base de esfuerzo o de lo que sea a ganado dinero por muy humilde que sea su origen, al contrario, ese es el espíritu que tanto admiro de la superación, sino que me refiero al perfil tan nuestro del que adopta la actitud típica denominada del nuevo rico, aquella actitud fanfarrona y nada acorde con realmente quien es esa persona).

El nuevo rico es una auténtica bicoca, un auténtico chollo para las empresas. Pues es alguien que siempre a vestido probablemente humildemente, que siempre ha consumido en la franja baja de la sociedad y de golpe se encuentra con el mundo al revés, y entonces no sabe como hacerlo, y lo peor quiere aparentar que es y ha sido así toda la vida, y que domina lo más de lo más del entorno nuevo en el que se encuentra.

El rico no aparenta, compra y punto, al nuevo rico no le importa comprar, le importa aparentar, y en base a esa actitud de demostrar (para quitarse el complejo de “su vida pasada) “quien es ahora” adopta patrones de consumo compulsivos e irracionales, sin sentido. No entiende el sentido del lujo o de lo snob, simplemente quiere adquirir esa imagen. Lo dicho, una auténtica bicoca para las empresas que sepan captarlos, como dice una canción… “aquel traje blanco…que pagaste por italiano”.

Escribió "Castillón"

Mujer, mujer

Una vez, no hace mucho, un día de marzo cuando hacía menos solecito del esperado, Rocío Gómez publicó en "Salvatierra Mártir" una oda mágica a favor del día internacional de la mujer. Ah, hermoso, un poema en prosa con la mas bella ilógica de un discurso hermosamente inútil que patentaba la necesidad de colocarse en primer plano. No se por qué, no lo necesita la señalada. Pero menos aún lo necesitamos las mujeres salvaterrenses.

Una mujer promedio salvaterrense resuelve todos los problemas en casa, posiblemente trabaja, envía a los críos a la escuela, los cuida, los cura, los ve crecer, tocante claro a la clase trabajadora; la socialmente limitada, ¿no es la pobreza en sí y potencialmente una manera de falta de libertad?. La mujer promedio de clase media atiende un negocio que ayer fue de ropa cara, hoy es de pizzas, mañana será una tortería, no se, de lo que sea. No sabe hacer nada mas. No se ensucia las manos tan fácil porque puede pagar a otras mujeres para que hagan el trabajo por ella. La mujer de clase alta es hueca, superficial, consumista, no le gusta pensar; sigue modas por obligación porque es hija de otra mujer igual de superficial que solo le enseñó eso. Esa mujer que a falta de una base educativa y cultural se vuelve parte de un culto religioso, no siempre católico puede decirse.

Hoy esta sociedad pretende haberse abierto a lo moderno y darle a la mujer un lugar de igualdad. Nada mas falso que eso, hoy la mujer es mas esclava que nunca y la peor parte es que muchas veces somos las mujeres las que preferimos ese papel de "Estúpidas Consentidas" con tal de permanecer en primer plano como las Grupies funcionales de los hombres que, búsquele patas por arriba o abajo, siguen siendo los mismos cabrones machistas de siempre, disfrazados de tolerantes feministoides. Cuando veo una mujer toda madreada me da coraje, le digo que vaya al DIF o al MP y me dice que tiene miedo, le respondo entonces que se chingue porque por cobarde se lo tiene bien merecido.

Ah Maquiavelo Maquiavelo, el fin justifica la guerra. La mujer no dejará nunca de ser objeto de los deseos del hombre quien finge ser una persona inteligente para respetar los derechos femeninos para de todos modos al final del día exigirle a su "vieja" aquello que tanto persiguió durante el noviazgo: La cena malpensados.

And I am the devil, now kindly undo these straps